Caja Negra es más que una simple editorial. Buscamos que el autor se sienta respaldado, con un trato personalizado y al detalle, dejando atrás viejos parámetros en los que el editor hace lo que le viene en gana con el material que recibe, travistiendo el texto y publicando un libro que se aleja abismalmente de la intención primaria de su creador. Cada cambio que se piense hacer será discutido con los autores, revisado una y otra vez hasta acercarnos lo más posible a la perfección. Cuando consideramos que algo no debe ser publicado, sencillamente no lo recibimos, pues para nosotros la labor de una editorial trasciende los límites de la corrección y publicación de libros, y adquiere un compromiso inquebrantable con el desarrollo de la cultura. Queremos alejarnos de aquella tendencia centralista que suele dominar nuestro país y abrir nuestras puertas a autores del interior, donde se tejen historias ricas en tradición y que, estamos seguros, deben darse a conocer.